Los mejores álbumes internacionales de 2017 (2ª Parte)

1. KENDRICK LAMAR – “DAMN.” (Interscope Records)

Por Ak/a

La creación artística sin consciencia de la misma por detrás se convierte en un ejercicio vacío. Sí, es cierto que en las pinceladas puede haber destellos de arte, pero al alejar la mirada el cuadro se mostrará incompleto. Kendrick Lamar se desmarca de su generación, queriendo crear una obra tan introspectiva como masiva, inabarcable y fascinante tras cada escucha. Ni Vic Mensa ni Vince Staples le pueden rozar; solo Chance The Rapper le mira a los ojos en la vertiente más masiva.

Personalidad, beats y narrativa; esquizofrenia sonora evocadora que rescata a maestros (DNA.), reinterpreta el shoegaze (PRIDE.) o rescata del hoyo a U2 para que ayuden a crear la que posiblemente sea su mejor canción en dos décadas (XXX.) No rozará la genial herida de good kid, m.A.A.d city (2012), ni se convertirá en referencia sociotemporal como To Pimp a Butterfly (2015), pero ratifica un prodigio abrumador, ya se escuche el álbum del derecho o, siguiendo la idea del convaleciente Pablo de la evolución continua de un disco, del revés. Estados mentales, enfrentamiento, conflicto (DAMN.!). Voz generacional desde la distancia que marcan los genios.