Mi Primera Vez en: Monegros Festival (Edición 2008)

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Este año el festival de Monegros anunciaba que volvía a sus raíces y retornaba a su antigua denominación “Groove Parade”. Por desgracia el mítico festival electrónico, creado por la no menos mítica Florida 135, se vió obligado a suspender la edición de este año tras no llegar a un acuerdo con los dueños del terreno donde se celebraba.

Tras esta cancelación me acordaba de la primera (y única) vez que asistí allá por 2008. Mis amigos ya habían asistido a alguna edición anterior y me hablaron maravillas. Un festival en el desierto donde grandes nombres del hip-hop y la electrónica actuaban durante 24 horas seguidas.

En aquella época se vivió una segunda edad dorada del éxtasis y andaba yo coquetando con la cultura de club, las drogas de diseño y un “suplemento ” más legal llamado efedrina. El house y el techno eran algo más underground que en estos tiempos de apestoso EDM, así que me pareció buena idea asistir al festival.

Furgoneta cargada de birra y comida basura y camino hacia Huesca. Pero la cosa se empezó a torcer nada más llegar. Tormenta en el desierto, en un lugar donde no llueve (casi) nunca unido a un gélido viento en pleno mes de julio.

Por suerte Violadores del Verso actuaban bajo una carpa con aspecto circense (las carpas en mitad del desierto son una de las imágenes icónicas del festival). Esa fue la primera actuación que vi, Kase-O , Lírico, R de Rumba y Maestro Sho-Hai : Violadores del Verso la mejor banda de hip-hop en castellano del mundo y de los que me declaro fan. Presentaron Tu eres Alguien su último disco de estudio hasta la fecha. Por la noche fue el turno de las leyendas del hiphop Cypress Hill con un impresionante muñeco hinchable sobre el escenario. Insane in the brain!

Soulwax la banda de los 2Many Djs con su espectáculo Nite Versions me habían impresionado en el FIB 2006 y lo volvieron a hacer en Monegros. Sobre todo el batería capaz de tocar del tirón todas las canciones en un concierto con alma de sesión Dj. Part of the weekend never dies.

Con el transcurso de las horas el frio hizo mella en mis amigos y el resto de asistentes. Uno a uno se retiraron a la furgoneta hasta que me quedé solo. Hacía tanto frío que recuerdo como en la tienda de merchandising del festival se agotó todo lo que pudiera usarse para combatir el frío.

Recuerdo vagar por el recinto, ver el set de los 2many DJs en un lateral de la carpa, creer haber entablado amistad con un grupo de chicos que tenían las pupilas como monedas de 2€ pero que en realidad sólo querían utilizarme para que les liara “cigarros de la risa”. Sus mandíbulas batientes me resultaron tan amenazadoras como la del resto de gente que me rodeaba .

Seguí vagando y encontré un escenario que no había visto en toda la jornada donde miles de personas saltaban a ritmo de bakalao, hardcore o como queráis llamarlo. Horrorizado volví a la furgoneta, mis amigos dormían ajenos a la megarave desértica. Después de intentar despertarlos a base de insultos volví al recinto. Con los primeros rayos de sol comenzaban a verse claramente las caras desencajadas por el consumo de speed, pastillas o cocaína. Por fin se unió un amigo y desayunamos unas cervezas a ritmo de techno. Horas después emprendimos el regreso.

Han pasado 7 años desde entonces. Algunos de esos 5 amigos que me acompañaban siguen siéndolo, incluso son más que hermanos, otros ya no, hay quien salió por la puerta de atrás.

Quien sabe qué futuro le depara al festival, lo que sé es que no creo que vuelva. Demasiada tralla para este viejoven a pesar de mí renovado amor por la electrónica y la cultura de club.

Cristian C. (@sickris)