Descubriendo a The Max Meser Group

“La gente no para de decirnos que somos de los sesenta, pero nosotros creemos que somos bastante modernos”

 

La semana pasada hablamos con el líder de la banda The Max Meser Group en el Antzoki de Bilbao. Max Meser empezó su proyecto en solitario pero siempre tuvo claro que quería formar una banda. El artista catalán-holandés vuelve por tercera vez a la capital vizcaína, y esta vez lo hace acompañado por una nueva banda y apostando por un sonido más agresivo, reencarnándose así en The Max Messer Group.

¿Por qué crees que el hecho de vivir en España no te fue de ayuda en tu carrera musical?

En el momento, en el sitio y en la situación en la que yo estaba era imposible. Yo crecí en la Costa Brava y ahí no había curro, no tenía pasta, no había manera de viajar ni de alquilar una furgoneta. No había nada y así no podía empezar. Me acuerdo que solía ir a Barcelona a intentar tocar en jam sessions o conseguir contactos pero me tenía que colar en el tren, no tenía dinero. Cuando me mudé a Holanda encontré trabajo, conocí gente, firmé un contrato…, fue todo muy fácil.

¿Cuando llegaste a Amsterdam conocías a alguien de la industria musical de antemano que te pudiera abrir alguna puerta?

Conocía a poca gente. Mi primo era cantante y él me quiso ayudar pero en realidad me lo hice yo todo. Me dí a conocer como cantautor, participé en varios conciertos en casas (living room concerts), open mics… y así conocí a mi manager.

¿Qué es lo más característico de vuestro sonido? ¿Cómo lo definirías?

Un sonido enfadado. Tenemos mucha frustración sacada de nuestras vidas que proyectamos en la música. Con los nuevos miembros de la banda se nota mucho: es un sonido un poco más agresivo que el anterior cuando tocábamos las canciones del primer disco, ahora la mayoría es todo nuevo. Algo combinado con el pop británico que nos gusta y muchas influencias de los 60 y 90. Últimamente sonamos más modernos. La gente no para de decirnos que somos de los 60, pero nosotros creemos que somos bastante modernos. Por el hecho de que no usemos ordenadores en el escenario no significa que no seamos modernos.

El año pasado formasteis parte de la programación del festival BIME PRO y también fuisteis los teloneros de The Strypes durante su gira por España. ¿Cuáles crees que son las diferencias entre el público español y el holandés?

La gente aquí siente más pasión por este tipo de música. Los holandeses son el peor público de Europa. En muchos conciertos que dí yo solo con la guitarra acústica la gente se ponía a hablar. Es muy difícil.

¿Cómo ha sido el proceso de grabación? ¿Qué método preferís?

Depende. Hemos grabado el primer álbum, el segundo y ahora cinco canciones con la nueva banda y cada vez ha sido diferente. La primera vez me pusieron un estudio profesional con un productor que nos decía qué teníamos que hacer. La segunda vez no nos convenció el resultado así que decidimos trabajar con otro productor y elegir nosotros las canciones para que fuese más cómodo. La última vez decidimos hacerlo nosotros porque somos los que pasamos tiempo ensayando y sabemos lo que queremos.

Acabáis de sacar un single llamado Free, ¿podemos decir que vamos a poder escuchar nuevas propuestas pronto?

Sí, el uno de marzo sacaremos otro single. Hemos dejado la discográfica y hemos empezado la nuestra propia. Cuanto más vemos cómo funcionan las cosas más nos damos cuenta de que es todo un negocio, así que hemos empezado a hacerlo nosotros. Por ejemplo, yo manejo la banda a medias con nuestro manager. Ahora tenemos nuestro propio sello discográfico, así que vamos a sacar un par de singles y si ahorramos algo sacaremos un vinilo, pero de momento solo de manera digital.

¿A qué película te gustaría ponerle banda sonora?

Siempre me ha gustado la idea de montar una banda sonora, aunque creo que no tendría que decidirlo yo, sino que me tendrían que proponer la película y yo intentaría hacerlo lo mejor posible. Si fuese una película nueva seria alguna de mi hermano, él es el cineasta de la familia.

¿Crees que es importante llevar una determinada estética que transmita una idea para reforzar tu música?

Creo que la imagen de una banda influencia la presencia. Está bien ver una banda con buena presencia en el escenario. En nuestro caso creo que sale bastante natural. Nosotros vestimos muy diferente, por ejemplo Ben solo lleva pantalones acampanados, lo cual no cuadra mucho con el estilo del resto. Pero cada uno lleva lo que le gusta. Tenemos un estilo natural. Nos encanta a todos la ropa, nos tendrías que oír cuándo vamos de compras (risas).

Hemos leído que trabajas en un tienda de discos en Amsterdam. ¿Hay alguna portada de vinilo que te guste especialmente? ¿Qué álbum te compraste con tu primer sueldo?

Me gusta la portada de The White Album de los Beatles. No sé qué álbum fue el primero, pero me acuerdo de uno que me compré que fue de los primeros: el álbum de Simon and Garfunkel que aparecía en la película Almost Famous. En una de las escenas al principio de la película la madre del chico le enseña la portada del vinilo. Vi la misma portada en una tienda y tuve que comprarlo. Después lo puse y me encantó. Descubrí a Simon and Garfunkel así de casualidad.

Ya que estáis de gira por España ¿a qué banda española os gustaría telonear y a qué grupo español escogeriais para que os hiciesen de teloneros a vosotros?

Max: Nos encantaría ir de gira con El Petit de Cal Eril, una banda de Cataluña. Son muy buenos, son casi como los Tame Impala catalanes. Si tuviésemos que elegir una banda para que nos hiciese de teloneros, por supuesto que no se lo pediríamos a ellos (El Petit de Cal Eril) pareceríamos estúpidos (risas). No sé ¿vosotros a quién elegirías chicos?

Ben: Es una pregunta difícil, creo que elegiría a The Limiñanas, son increíbles. Espera, The Limiñanas son franceses no españoles…

Harrie: Entonces nos podríamos hacer de teloneros a nosotros mismos. Podemos montar otra banda y tocar canciones diferentes (risas).

¿En qué se basan vuestras canciones? ¿Experiencias propias o ficticias?

Siempre suelo escribir sobre experiencias propias, pero en el álbum Pictures hay una canción que se titula Mr. Jimbo y habla de uno de nuestros mejores amigos. Le escribimos una canción, bueno, dos en realidad. Creo que esas son algunas de las pocas canciones que he escrito de esa manera, las demás son todas basadas en experiencias propias. Pero no sé, depende, siempre me gusta pensar que la canción sale sola, no es algo que yo medite antes.

Hoy en día muchas bandas tienen la necesidad de reinventarse y probar estilos distintos constantemente ¿crees que es necesario?

Creo que es necesario y está bien si quieres tener éxito comercial. También creo que es algo que sale bastante natural, al menos en nosotros. Es necesario cambiar un poco, porque si no te aburres. Por ejemplo, ya no tocamos canciones del primer álbum, nos las piden en algunos conciertos pero con la nueva banda ya no las tocamos.

Y por último, ¿a qué se debe el cambio de nombre?

Al principio empecé como solista y luego decidí formar una banda. Quise ponerle un nombre al grupo pero la discográfica y todos me decían que era una mala idea porque ya había empezado con un nombre que me identificase. Entonces se quedó así. Pero ahora que la banda ha cambiado hemos decidido poner un nombre clásico que incluya al resto. Yo nunca he querido ser solista, siempre he querido estar en una banda. La música la hacemos los cuatro y sin los cuatro no hay música.

Parece que el lavado de cara por el que la banda ha apostado al incluir a nuevos miembros va por buen camino, y es que los cuatro colegas saben cómo pasarlo más que bien durante su gira Ice Cream Dream Tour. Según nos cuentan, eligieron este nombre cuando fueron a hacer una sesión de fotos y les entró la gula de comprarse un helado. ¡Ah!, y apúntate esto para cuando hagas un test de los de ¿cuánto conoces a tu artista favorito?: su sabor preferido es vainilla.

Entrevista realizada por Leire López e Irune Vega