Las Diez Mejores Canciones de Dropkick Murphys
¿Realmente existe alguien que no conozca a los Dropkick? Me parece que es es imposible. Esta banda lleva años ofreciendo el mejor punk/rock con temática irlandesa, o celta si queremos ser más específicos. La fusión que consiguen con su música ha servido de inspiración a muchas bandas que han intentando seguir sus pasos, pero nunca han superado a los maestros. Formados en 1996 en Quincy, Massachusetts, la banda toma su nombre de John “Dropkick” Murphy, un luchador irlandés-estadounidense famoso en los años 50/60.
¿Cómo? ¿No son de Irlanda? Son descendientes de inmigrantes que han sabido ser fieles a sus raíces, aunque sean todos americanos. En sus canciones podemos encontrar distintos instrumentos tradicionales irlandeses, como la gaita o el acordeón, combinado con elementos más potentes como guitarras eléctricas, y sin olvidarnos del siempre importante violín. Conocidos por sus enérgicos directos ya cuentan con miles de cientos de seguidores en todo el mundo. A lo largo de los años han editado varios discos, navegando en aguas que van desde la historia, sobre todo la que tiene que ver con su sangre, hasta la camaradería y la resistencia. Su compromiso con diversas causas sociales han contribuido a su estatus como una de las bandas más queridas en la escena. Pero hemos venido a hablar de sus mejores canciones, esto no es un especial sobre su carrera. ¡Al lío!
The Boys Are Back – Signed and Sealed in Blood (2013)
Canción ideal para comenzar sus directos. Una reunión de amigos, juntos celebrando la conexión que existe entre todos ellos. Ha sido utilizada en varios eventos deportivos y programas de televisión, contribuyendo a su popularidad. Su energía y mensaje positivo le hacen un hueco en este pequeño especial.
Worker’s Song – Blackout (2003)
Esta canción destaca por su tono melancólico, sobre todo por su letra que aborda el tema de la clase trabajadora y las luchas laborales, centrándose en la vida de un trabajador y sus desafíos, trabajo duro y la solidaridad entre compañeros. Quieren honrar a aquellos que han trabajado arduamente, transmitiendo un sentido de resistencia y orgullo en la comunidad.
Skinhead on the MBTA – Do or Die (1998)
Es una de las canciones más emblemáticas de los Dropkick Murphys y pertenece a su debut. Es una versión de una canción tradicional irlandesa llamada “Charlie on the MTA”, y en ella se relata la historia de un hombre que queda atrapado en el metro de Boston porque no tiene suficiente dinero para pagar el billete. Puede llevar a malentendidos y generar problemas, ya que skinhead a menudo está asociada erróneamente con movimientos racistas y de extrema derecha, algo que se aleja mucho de la realidad ya que la banda ha sido abierta sobre su rechazo al racismo.
Captain Kelly’s Kitchen – The Warrior’s Code (2005)
Aquí se nos narra la historia del Capitán Patrick Kelly, un irlandés que fue condenado a la pena de muerte y ejecutado en Londres en 1883 por su participación en un intento de rescate que no acabó bien, pues un policía perdió la vida. Al contar la historia de un personaje histórico irlandés desde la perspectiva de un amigo del capitán, que creía que había sido condenado injustamente, la banda rinde homenaje a las raíces y la herencia cultural de la música celta.
Johnny, I Hardly Knew Ya – The Meanest of Times (2007)
Una de las canciones tradicionales irlandesas más conocidas mundialmente, que ha sido versionada por numerosos artistas a lo largo de los años, incluidos los Dropkick Murphys. ¿Otra cover? Es que es uno de sus temazos y siempre suena en sus directos. La canción nos cuenta la historia de un soldado que regresa a su hogar después de haber estado en el ejército y haber sufrido graves heridas. La letra refleja la dura realidad de la vida militar y el impacto devastador de la guerra en la vida de las personas.
Caught in a Jar – Sing Loud, Sing Proud! (2001)
Los Dropkick en estado puro. ¿Os gustaría saber que se siente al estar en una situación difícil a través de su música? Se nos transmite un sentimiento de frustración y la lucha por liberarse de las limitaciones impuestas por la vida. Es una muestra de la capacidad de la banda para expresar emociones intensas a través de su música.
Barroom Hero – Do or Die (1998)
Es una de las canciones más destacadas y emblemáticas de la formación. En esta ocasión asistimos a la historia de un hombre que solía ser un “típico cliente de taberna irlandesa” en su juventud, conocido por su valentía y su disposición para luchar por sus amigos. El tiempo pasa por todos y nuestros actos nos hacen crecer como personas, las decisiones que tomamos nos cambian constantemente.
The State of Massachusetts – The Meanest of Times (2007)
Aquí abordamos temas como el arrepentimiento, la redención y la lucha contra los demonios internos. La canción cuenta la historia de alguien que se enfrenta a dificultades y desafíos personales, buscando la redención y poder comenzar de nuevo. Exploramos a través de su música el conflicto entre el pasado y el presente. Al mencionar la ciudad de Boston y de como es la vida allí, la canción refuerza la conexión de los Dropkick Murphys con su ciudad natal.
Rose Tattoo – Signed and Sealed in Blood (2013)
Este increíble himno celebra la lealtad, el amor y la conexión familiar. Se utiliza el tatuaje como una metáfora para representar un vínculo que persiste en el tiempo. Ha sido uno de los éxitos más destacados de los Dropkick Murphys. Su ritmo, que se acerca a una especie de balada, y su mensaje positivo la han convertido en una de las canciones más reconocibles y apreciadas de la banda.
Kiss Me, I’m Shitfaced – Blackout (2003)
Básicamente se nos cuenta, de una manera realmente divertida, lo que sucede en una típica noche de borrachera, las situaciones cómicas y a menudo caóticas que ocurren cuando se ha bebido demasiado. No dejan de lado las consecuencias que estas cosas tienen, sobre todo pasadas unas horas, cuando la resaca hace acto de presencia y vagamente recordamos más allá de la cuarta o quinta pinta. Es una canción que conecta increíblemente con el público, seas o no fan de los de Boston.
Dejamos fuera de la lista su canción más conocida, porque destaca sobre todas las anteriores y se merece un lugar especial dentro de este pequeño artículo.
I’m Shipping Up to Boston – The Warrior’s Code (2005)
Canción que se hizo especialmente famosa después de ser incluida en la banda sonora de la película “Infiltrados”, de Martin Scorsese. Toma su título y gran parte de su letra de una composición de Woody Guthrie, un icono de la música folk estadounidense. ¡Exacto! Otra versión, mezcla única de punk rock y elementos celtas que define el sonido de los Dropkick Murphys a la perfección.