Clutch + Graveyard + Kamchatka (Sala But, Madrid)
Segunda fecha de Clutch en Madrid después del Sold Out dos días antes, el miércoles 11 de diciembre, en la que ha sido la mayor aventura de la promotora The Mad Note Co. , habitual en traernos magníficos artistas a Madrid y otras ciudades españolas. El viernes 13, americanos y suecos volvieron a realizar una velada de Rock que se quedará grabada en las retinas de todos los asistentes.
Mientras bajábamos las escaleras de la sala pudimos ver carteles en los que se podía leer “No Crowdsurfing” logro respetarse en casi todo momento. Comenzamos con Kamchatka, los más desconocidos por el público, a pesar de contar con la friolera de siete álbumes publicados. Los suecos son un trio de rock perfecto, si hubiera un punto de encuentro en estilos entre Graveyard y Clutch este bien podría ser Kamchatka. Hard rock afilado y con grandes dosis de riffs que consiguen meterte en el concierto de lleno sin poder dejar de seguir el ritmo marcado.
Los suecos Graveyard con su sobriedad Rock con grandes dosis de blues llegarían más tarde en un concierto tremendamente sólido, quizás fueron los que sonaron más apáticos. Con la característica coz rasgada de Joakim Nilsson, canciones como “The Siren” o “Uncomfortably Numb” suenan como un tiro, rock-blues de una fortaleza envidiable. Graveyard guardan la serenidad de las grandes bandas de rock de los setenta, impregnándolo de un blues que realmente parece lejano para su Suecia natal, pero que consiguen traspasar cualquier frontera terrenal para acercar sonidos y hacerlos suyos, consiguiendo que una vez que estos sean tocados por ellos, estos sonidos vuelvan a ser de todos.
El plato fuerte saldría a las nueve y media de la noche, los reyes del boogie, Clutch. Con un repertorio capaz de fascinar dos días antes, cambiarlo totalmente (sólo repitieron una canción y el bis) y seguir mostrando a una de las bandas más autenticas y más en forma de la actualidad. Clutch, a pesar de poder haber entrado en todo tipo de festivales rock e incluso metal, beben del rock sureño, del blues, del Stoner y hasta del funk para crear una música realmente vibrante, con unos ritmos y unas melodías salvajemente venenosas. Cada riff de la banda de Maryland es una obra maestra del rock, un veneno que te inoculan a través de la potencia de los amplificadores con el que no puedes dejar de mover los pies o bailar durante todo lo que dure el concierto.
El set, altamente representado por su ultimo álbum “The Book of Bad Decisions” comenzó con “Inmortal” desatando la furia Rock en la sala But, con un Neil Fallon con camiseta con referencia a “2001 una odisea en el espacio” y a modo de predicador con una voz que añade instrumentación a las canciones. Con “Earth Rocket”, ya se montó un pogo en el centro de la sala, que no pararía hasta el final convirtiendo el concierto en una auténtica hermandad. Tocaron algo de casi todos sus discos, destacando canciones como “The Incomparable Mr. Flannery”, “Willie Nelson”, “H.B. is in Control” y “D.C. Sound Attack!” que cerró el set. Un último arreón para cerrar con el bis, su ya mítica “Electric Worry” y la reciente versión de la Creedence “Fortunate Son” dejarían para la posteridad un concierto que podía haber disfrutado por partida doble cualquier fan acérrimo de la banda, al crear en un par de días dos conciertos totalmente distintos.
Con más de veinte años en activo Clutch merece por méritos propios estar en el olimpo del rock, habiendo influenciado a ingentes cantidades de bandas a lo largo de su historia. Dos noches históricas en las que Madrid les reconoció el trabajo hecho a lo largo de estos años que no han parado de girar y sacar material nuevo sin apenas descanso. Esperamos que sigan por la senda que nos tienen acostumbrados y podamos verles de nuevo con otro álbum lleno de estupendas canciones.
Crónica: Ramón Bravo
Fotos. Luis J. Córdova
Debe estar conectado para enviar un comentario.