Crónica FIB 2016. La Remontada del FIB
La edición 2016 del FIB ha estado marcada por dos hechos importantes: por un lado, la fuerte apuesta por el eclecticismo y nuevos sonidos urbanos y por otro lado, el éxito de crítica y público. La apertura clara hacia sonidos como el hip hop con artistas de la talla de Kendrick Lamar, Kid Simius o el colectivo islandés de rap Reykjavíkurdætur ha sido claramente un enorme acierto por parte de la organización.
Pero las excelentes cuotas de asistencias han sido fruto del equilibrio entre estos nuevos sonidos urbanos y el clásico repertorio de corte más indie o electrónico – históricamente vinculado al FIB – con bandas como Massive Attack, La Habitación Roja, The Vaccines, The Chemical Brothers o Muse, lo que ha permitido rozar cifras de asistencia similares a las de 2011: 170.000 asistentes en cuatro jornadas de festival. 35.000 asistentes el jueves, 40.000 viernes y domingo, y unos impresionantes 46.000 el sábado. Tras unos años navegando en el desierto – nunca mejor dicho – el FIB parece haber recuperado la identidad perdida y el rumbo de la mano de Melvin Benn, fidelizando a una bolsa importante de FIBERS procedentes de Reino Unido e Irlanda y recuperando al FIBER español que había abandonado Benicassim estos últimos veranos como destino festivalero.
JUEVES – La Fiesta Electrónica de Bienvenida (Quico Sabanés)
La primera jornada del festival fue etiquetada por el propio director festival como “una gran fiesta electrónica de bienvenida” y razón no le faltó. Se podría que decir que por la exclusividad y calidad de su actuación Soulwax fueron los ganadores de la noche, aunque aún lo desconocíamos. La banda de los belgas 2manydjs ofreció un espectáculo lleno de energía. Mientras la gente iba bailando y congregándose en el Escenario Las Palmas la formación de los belgas repasaba algunos de sus míticos temas como “E Talking” o “NY Excuse”.
Lo de Skepta fue un show casi exclusivo para británicos. El hype por el rapero de Londres aún no ha llegado aquí y eso se nota. Una turba de extranjeros ocupó las primeras filas del escenario principal mientras Skepta realizaba un breve pero intenso concierto. Su escenografía totalmente oscura, con la cual costaba localizar al artista sobre el escenario, incitaba a poguear a los fans más acérrimos pero sacaba del concierto a los curiosos. No faltaron temas como “Konichiwa” y “Shutdown” aunque al concierto en general le faltó un poco más de espectáculo.
Presentándose bajo el nombre de “Las Weers” y como “secret show” – a pesar de que ellas ya lo habían anunciado en sus redes y todos sabíamos a lo que íbamos -, aparecieron las Hinds sobre el escenario de la Carpa FIB Club a las 00:15h. Siendo ya su segundo año consecutivo actuando en el festival, esta vez ya lo hacían con su primer LP bajo el brazo. A la joven banda madrileña ya se le pudo notar la experiencia de haber estado durante un año girando sin dejarse una sola ciudad del planeta. La sensación en sus conciertos por suerte sigue siendo la de siempre, absoluta diversión. Unas Hinds mucho más sueltas en el escenario nos hicieron disfrutar como enanos con “Bamboo”, “Garden” o la cover de Thee Headcoatess con la que acostumbran a cerrar, “Davey Crockett”, acompañadas de Cremades y compañía sobre el escenario (Lucía Moreno)
A diferencia de Skepta, a los que no les faltaron espectáculo fueron a Major Lazer. Aunque ese espectáculo fue digno de verbena de pueblo. Cuatro bailarinas y sus tres integrantes sobre el escenario que iban turnándose a los platos mientras iban sonando algunos de sus temas propios y otros como “El Taxi” o “Gasolina” que causaron el momento facepalm de la noche. No cabe duda de que la actuación fue toda una fiesta que se asombraban con los visuales, fuego, bailarinas y el show de Diplo como animador pero más de uno que fue con escepticismo terminó horrorizado del todo.
VIERNES – The Chemical Brothers o la vuelta a los orígenes. (Quico Sabanés)
No había mejor manera de empezar la segunda jornada del festival que con Rat Boy y Reyjavíkurdætur. Mientras que el primero nos ofreció su particular show gamberro, muy del estilo de otros nombres del cartel como FIDLAR, con pogos, empujones y sudor por doquier, el grupo islandés de rap formado por 13 mujeres y con letras de clara tendencia feminista nos sedujo rápidamente. Con un espectáculo digno de performance callejera, estas chicas nos hicieron bailar y disfrutar a los más madrugadores en el escenario South Beach. Actuación completamente divertida en la que se comieron el escenario. También cabe decir que al haber tanta gente sobre este era imposible no fijarse en alguien y aburrirse. Esperemos que el festival siga apostando con propuestas de este estilo difíciles de ver.
A continuación nos adentramos en el post-punk de The Soft Moon. La banda americana tenía un horario atípico viendo los slots que tenían en sus últimas actuaciones en la península. La banda de Luis Vasquez ofreció un concierto de los de cerrar los ojos y disfrutar, con un gran poder e intensidad instrumental. Un show completamente distinto fue el de Kero Kero Bonito. El trío de Londres ofreció un divertido concierto de agradable electrónica “no trallera” con una Sarah Midory disfrutando con el público mientras nos enseñaba sus “Flamingo” de peluche y bailaba con él. Como en líneas generales durante todo el festival se respiró un gran ambiente en el concierto.
Como ya sabemos, la banda de Justin Young adora nuestro país, y aunque nos habían visitado hacía apenas cuatro meses, The Vaccines han vuelto a España para regalarnos un poquito más de su tercer álbum “English Grafitti”. Para seguir con su ritual habitual abrieron el concierto con las enérgicas “Handsome” y “Teenage Icon”, siguieron con una serie de temas de su último trabajo, lo que provocó que el show fuera perdiendo un poco de fuelle. Cabe decir que la banda no tuvo un sonido excelente, ya que incluso la voz de Justin sonaba baja en ocasiones, pero esto no fue problema para dar un pedazo de bolazo en la segunda mitad del concierto. A partir de que sonara “I Always Knew”, el resto fue rodado, un hit tras otro cargado de esas representativas guitarras y melodías tan bailables, las cuales fueron disfrutadas por todo aquel que pisaba el Escenario Las Palmas esa noche. (Lucía Moreno)
Una vez pasadas las pocas guitarras del día nos adentrábamos en la electrónica de nivel con las sesiones de Jamie XX y The Chemical Brothers. El primero afrontando un abarrotado Escenario VISA estuvo al frente de sus platos a base de vinilos y no una sesión pregrabada en el ordenador, cosa a agradecer en estos tiempos. Eso sí, aunque ya sabíamos que venía en formato Dj Set nos parece un poco crimen pinchar tan poco canciones propias, aún más después de sacar el aclamado y lleno de temazos In Colours. Si alguien quería disfrutar del buenrollismo del último álbum de Jamie es probable que esta sesión se le hiciera un poco cuesta arriba. The Chemical Brothers cambiaron el tercio totalmente. Con un magnífico espectáculo audiovisual digno de las mejores bandas, el dúo de Manchester realizó una de las mejores actuaciones del festival. Y es que disponen de una gran batería de éxitos como “Hey Boy, Hey Girl”, “Go” o “Galvanize” que hacen mover hasta al más apático. Nada que ver con lo visto el día anterior con Major Lazer. Esto sí que es un cabeza de cartel.
SÁBADO – Muse y el caloret (Brais Iglesias Castro)
Las largas colas en el acceso al recinto desde primera hora de la mañana hacían presagiar que la jornada del sábado iba a ser la más multitudinaria de la presente edición del festival. Musers por doquier agolpados en las primeras filas del Escenario Las Palmas y un calor extenuante fueron el panorama que se encontraron Cápsula a las 19:00h. Los argentinos rindieron un dignísimo tributo a David Bowie en el que interpretaron el Ziggy Stardust prácticamente entero además de otros éxitos del Duque Blanco como “Heroes” o “Rebel Rebel” ya en la recta final del concierto.
Acto seguido llegaría el turno de La Femme en el Escenario VISA. Uno de los grupos de la edición de 2014 que dejaron huella en el público FIBER regresaban a Benicassim para deleitarnos con su particular show lleno de psicodelia y rock bailonga a pesar de sufrir el azote de la programación del festival y verse obligados a tocar en un horario horrible (19:30-20:15). Además, tuvimos la oportunidad de presenciar en directo el estreno de algunos temas del próximo álbum de la banda, titulado Mystere.
Nuestra siguiente parada fue en la Carpa FIB Club para presenciar los conciertos de dos de los nombres nacionales más interesantes del cartel de este año: Baywaves y Lois. Los primeros, con apenas un EP en el mercado, con su pop de tintes psicodélicos convencieron y llenaron la carpa de público. A continuación llegaría el turno de ver en acción a Lois Brea, el vocalista de Trajano! en su proyecto en solitario, de sonidos más cercanos a artistas en la onda de Mac Demarco. Experimentación y New Wave que nos sirvieron como previa perfecta antes del concierto de una de las bandas más icónicas de la década de los ochenta: Echo and The Bunnymen.
La banda de Ian McCulloch interpretó un setlist repleto de hits uno tras otro que hizo las delicias de un público que abarrotó el Escenario VISA en plena víspera del concierto de Muse. Dosis de nostalgia al ritmo de temas del calibre de “The Killing Moon”, “Bring On The Dancing Horses”, “The Cutter”, “Nothing Lasts Forever” o “Lips Like Sugar” que consiguieron crear una atmósfera única e irrepetible durante aquella jornada.
Muse era el gran reclamo de este festival. El que causó que el recinto volviera a estar lleno como en los buenos tiempos y que llegaran decenas de autobuses de todos los rincones de la península exclusivamente para ese día. En las primeras filas se podían ver más pulseras de día que abonos. No hace falta decir que el trío inglés ofrece uno de los mejores directos en la actualidad y por lo tanto el espectáculo estaba asegurado. Lo tenían todo para salir victoriosos del festival. Con un épico inicio en el que más de un veterano fan llego a pensar que esta noche podría ser épica (“Psycho”, “Plug In Baby”, “Hysteria” y “Bliss” del tirón) ya tenían a todo el público en el bolsillo. Pero luego ocurrió la decepción. Un sinsentido carrusel de canciones lentas y de la época menos aclamada (pero más comercial) de la banda entra las que se encuentran “Undisclosed Desires” o “Dead Inside” desconectó al público para el resto del concierto. El inicio cañero dio un giro de 180 grados a la balada ñoña. Luego el concierto tuvo sus altibajos de ritmo con temas como “Time Is Running Out” o “The Globalist” y el momento cómico cuando todo el confeti que se lanzó en “Mercy” se quedó pegado al escenario. El ya habitual cierra con “Knights of Cydonia” consiguió al menos cerrar el concierto con un buen sabor de boca pese a la sorpresa de los asistentes, ya que esperaban un concierto cercano a las dos horas y al final fue de hora y media.
Pese a criticar el setlist no vamos a negar que la banda realizara un mal concierto. Muse es una máquina tan bien engrasada en el directo que raras veces defraudará. Seguro que gran parte de los asistentes salieron satisfechos del concierto, pero entre los seguidores de la banda con más de un concierto suyo a sus espaldas había consenso en que había sido el peor concierto de Muse que habían vivido. (Quico Sabanés)
Mientras tanto a las 23:20h en el Escenario VISA Alison Mosshart empezaba a lanzar sus ya tradicionales espasmos y gemidos al ritmo que marcaba los trallazos del guitarrista Jamie Hince. Ya habíamos visto en acción a The Kills hace apenas unas semanas en el Mad Cool pero en Benicassim nos terminamos de enamorar de ellos. Rock en estado puro que los jeiters de Muse agradecimos enormemente. Donde esté la Mosshart que se quiten los giligritos del castrati Bellamy.
De madrugada ya, la electrónica de Delorean en el South Beach nos volvió a demostrar que no sabemos valorar lo que bueno que tenemos en nuestro país (y encumbramos sólo a los Izales de turno), y más si lo comparamos con el show soso e insípido que ofrecieron posteriormente los británicos Disclosure en el Escenario Las Palmas. A veces uno se pregunta cómo una propuesta tan vacía de contenido puede tener tanto éxito: sonido blando, músicos desganados y una versión del archiconocido “You And Me” muy descafeinada. Pero por suerte estaban Breakbot y su funky disco en la recámara para acabar el Sábado noche con un buen sabor de boca. Sin duda, un gran cierre de jornada.
DOMINGO – Massive Attack, Andrea Levy y Froilán. (Brais Iglesias Castro)
El domingo amanecía con caras de resaca y cansancio, última jornada de festival y los excesos de las noches previas comenzaban a pasar factura. Pero no por ello íbamos a dejar de entrar en el recinto a primera hora.
Tijuana Panthers era nuestra primera parada programada a las 19:00h en el Escenario VISA. Los escasos cientos de FIBERS que nos presentamos ante la banda pudimos disfrutar de una buena sesión de surf pop con reminiscencias constantes a los sesentas. Nada más acabar su actuación nos fuimos corriendo al Escenario Las Palmas porque a las 20:00h estaba programado el concierto de una de las bandas del cartel de esta edición que más ganas teníamos de ver en directo: FIDLAR. El pistoletazo de salidalo marcaron con una espectacular cover de Sabotage de los Beastie Boys.
¿Quién ha dicho que con toda la solana pegando de lleno en Benicassim no se pueden montar unos buenos pogos? Los angelinos son una de esas bandas que toquen a la hora que toquen sabes que los empujones y el sudor están asegurados. Con uno de sus temas más emblemáticos, “Cocaine”, FIDLAR cerraron una de las mejores actuaciones de la jornada en Benicassim.
A las 21:30h llegaría el turno de ver en acción en la Carpa FIB Club a uno de los nombres más misteriosos del cartel: Chicano Bulls. A priori el único dato que teníamos al respecto es que componentes de The Parrots y Los Nastys compartirían escenario. Pero no sabíamos qué tipo de repertorio nos íbamos a encontrar. Pronto nos sacarían de dudas. Además de tocar temas propios de ambas bandas, como la espectacular “No me gustas, te quiero” de The Parrots, interpretaron otras canciones como “Baby”. Sin duda, el concierto más macarra de la presente edición del FIB, logrando poner patas arriba a un público que en sus primeras filas estaba formado por ilustres miembros de la familia malasañera como las Hinds, Carlitos Alcántara – Ricardo Gómez – o Lois.
A las 22:20h comenzaría el concierto de Mac DeMarco en el Escenario VISA. El canadiense nos presentó un pop sencillo y simplón que por algún extraño motivo nos consigue atrapar y nos hizo quedarnos enganchados ahí en frente del escenario. “Salad Days”, “No Other”, “Another One”, “My Kind of Woman” y la romanticona “Still Together” fueron solo algunos de las piezas de su repertorio. Seguro que al bueno de Mac le han puesto morritos desde las primeras filas por encima de sus posibilidades.
El concierto de Kendrick Lamar es un claro ejemplo de que los slots de raperos han venido para quedarse, y cada vez en mayor tamaño. El artista de Compton llegó como un huracán a Benicassim dispuesto a comerse el escenario y conquistar al público. Con una banda detrás en las que a veces parecía que uno estaba en un concierto de Jazz Kendrick no paró de dominar a sus asistentes incitándoles a animar en todo momento mientras sonaban temas como “Swimming Pools (Drank)”, “King Kunta” o “Bitch, Don’t Kill My Vibe”. A diferencia del concierto de Skepta se apreció mucha más presencia española entre el público. La gente llegó a estar tan entusiasmada que acabó coreando a todo pulmón el nombre de Kendrick entre canciones. También con su característico cierre con “Alright” se abrió una nueva era para el rap en este festival. Sí que es cierto que para ser cabeza un concierto de una hora justita puede parecer excesivamente corto y aún más con el repertorio de temas con el que cuenta Lamar, pero ya sus conciertos en sala no tienen la fama de ser precisamente largos. (Quico Sabanés)
A las 02:30h Massive Attack, como Special Guests, y su potente trip-hop fueron los encargados de cerrar el FIB 2016 en cuanto a lo que grandes conciertos en el Escenario Las Palmas se refiere. La banda de Bristol, que lleva en activo ya casi treinta años, trajo a Benicassim un gran formato visual que nos bombardearon con montones y montones de mensajes de contenido político y social en una pantalla gigante. No faltaron las referencias al ISIS, al Brexit, al supuesto (auto)golpe de Estado de Erdogan en Turquía y una lectura en clave de humor de la situación social y política en España. “Pedro Sánchez y Andrea Levy no se ponen de acuerdo para gobernar pero sí para ir al FIB”, referencias al caloret y “Froilán cumple 18 años junto a su novia instagrammer” fueron sólo algunos de los mensajes que pudimos leer en sus proyecciones.
Ante la ausencia de Horace Andy – lo que motivó la no inclusión en el setlist de temas célebres de la banda como “Angel” – se subirían al escenario unos jovenzuelos llamados Young Fathers – que actuaban esa misma noche en el festival y que pudimos disfrutar en la fiesta bienvenida del FIB 2015 – para interpretar además de “Voodoo in My Blood” y “He Needs Me”, dos temas de su propia discografía: “Old Rock n Roll” y “Shame”. “Risingson”, “Ritual Spirit” (con Azekel), “Inertia Creeps”, “Safe From Harm” y un cierre insuperable con la bella y nostálgica “Unfinished Sympathy”, interpretada por la cantante invitada, Deborah Miller, fueron motivos más que suficientes para sentenciar que este ha sido, sin ningún atisbo de duda, el mejor concierto del festival.
Se retiraron Massive Attack tras algo más de 1h 20 minutos de concierto y empezaron a sonar las notas del “Danubio Azul” de Strauss. Pocas tradiciones se respetan más en el FIB que ese vals espontáneo que edición tras edición los jóvenes – y no tan jóvenes – FIBERS más animosos llevan a cabo al finalizar los conciertos el domingo en el escenario principal. Por momentos como este, el FIB es especial.
Los que todavía teníamos energías para despedir el FIB hasta el amanecer fuimos testigos de algo que va camino de ser otra célebre tradición del FIB: disfrutar de las sesiones dj del veterano Aldo Linares, llenas de eclecticismo, en donde tienen cabida nombres desde KC & The Sunshine Band hasta Tame Impala o Kasabian como colofón final de la programación de la carpa FIB Club.
El sol empezaba a asomar por el horizonte, el FIB 2016 ya era historia. El año que viene más y mejor. Larga vida al FIB.
Debe estar conectado para enviar un comentario.