Crónica Atlantic Fest 2021

Fecha: 12 al 24 de Julio de 2021
Sala: Aparcamiento playa de la Concha
Ciudad: Vilagarcía de Arousa (Pontevedra)

 

Hay que reconocer el mérito que tiene organizar un festival el verano del año en el que la pandemia, aunque controlada, aún sigue entre nosotros.  Y aunque el cambio de localización ya estaba previsto en 2020, tuvo que llegar la recurrente pandemia para que el festival regresase a su lugar de origen (en 2013 se celebró la última edición del Festival do Norte en Vilagarcía de Arousa en el recinto FEXDEGA, el lugar que tantas buenas noches ofreció, y que desde hace unos meses sirve de vacunódromo de la región). Con todo ello volvieron los preciosos atardeceres que se ven desde la Praia da Concha o desde Carril, con Cortegada de fondo, un festival sin igual en el corazón de las Rías Baixas. Desde New Live no han dejado de trabajar para ofrecer en 2021 lo que el dichoso virus no permitió celebrar el año pasado. Quedan lejos los conciertos celebrados en el festival en la praia do Bao en los que la distancia social era algo inimaginable por aquel entonces. Esta edición con un formato bastante diferente al acostumbrado, uno y dos conciertos al día, con el público sentado y con la mascarilla puesta, medidas que por desgracia, parece que van a ser la tónica durante este año en los festivales de verano, el Atlantic Fest ha conseguido salvar la edición marcada por el calor y saciar esas necesidades que empezábamos a olvidar como son viajar, o juntarse con amigos que hacía tiempo que no veías con el único propósito de disfrutar de un concierto. 

En un formato de dos semanas en el que lo recomendable era elegir unos cuantos conciertos para ver. Tras pasar por Vilagarcía La Habitación Roja que presentaba su nuevo álbum, el jueves 15 el festival comenzaba a calentar motores con uno de sus platos fuertes, que nos permitió asistir a la tan bien recibida este verano “putagira“, con Martí Perarnau en los sintes y Manuel Cabezalí a la guitarra. Zahara que lleva unos cuantos años rodeándose de lo mejor del panorama nacional para firmar álbumes y directos sobresalientes, presentaba en esta ocasión su nuevo disco Puta 2021. Creado en medio de la pandemia, un álbum hecho para sobrevivir y para ahondar cada vez más profundamente en las historias de mi vida que me habían hecho daño, y así lo lleva al directo. La artista jienense fue repasando una a una las canciones del nuevo álbum Canción de Muerte y Salvación, Sansa, Taylor, mientras poco a poco los allí congregados nos íbamos habituando a disfrutar de canciones bailables sentados en una silla. Llegando a la rave con Berlín U5, en la que creo que todos sin excepción, entre loops de Jack Antonoff reprogramados por el genio Perarnau, de una u otra forma teníamos en la mente lo que pasaría si quedasen 58 segundos para el fin del mundo, pues eso,.. bailar!! (sentados en una silla) es una gran opción. En los bises aún hubo tiempo para la copla de Dolores que dedicó a su abuela y al diseñador de su Úbeda natal que le hace los vestidos. 

El viernes 16 era el turno de Dorian que ya habían pasado en 2019 por el festival. Un concierto, como rezan en su recién estrenado documental, en el que no existe ayer, ni mañana. Con el sonido mermado por el viento que sopló durante toda la tarde noche, fueron metiéndose al público en el bolsillo con temas de su último álbum Justicia Universal que fueron compaginando con sus grandes hits. 

El sábado 17 era el turno para Depedro y León Benavente, el primero tocó con un calor que no se recordaba en Vilagarcía pero que sirvió para caldear el ambiente. Con un sonido mejorado respecto a la noche anterior, gracias al poco viento que soplaba en el aparcamiento reconvertido, Jairo Zavala y su banda repasaron unos cuantos temas de sus últimos discos haciendo las delicias de los allí presentes, culminando el repertorio con Nubes de Papel, canción dedicada a la organización del festival que sin duda son unos auténticos héroes en tiempos de pandemia y Llonora con la que el público se quitó literalmente los sombreros mientras el sol lucía ya bajo en el horizonte de la playa de la Concha. Por la noche llegaba el turno de la que posiblemente sigue siendo la banda nacional con mejor directo, los Boba, Baos y Rodríguez hicieron vibrar al público desde Cuatro Monos a Ser Brigada, redescubriendo una perla de canción como es Niño Futuro, homenaje al fallecido Rafael Berrio, en la que Boba al fin nos enseñó su libreta.

Reseña especial para el concierto íntimo y a medio aforo ofrecido en el auditorio por parte de María José LLergó, en lo que sirvió de previo del festival el miércoles 14, presentando Sensación 2020, álbum que es mucho más que la conocida Me Miras Pero No Me Ves, porque voces como las de María José son las que dejan huella con el paso del tiempo en la música contemporánea. Con Paco Soto a la guitarra, fue desgranando una a una las canciones con un sonido inmaculado (mérito compartido con el equipo e instalaciones del Auditorio de la localidad). Hubo tiempo para la canción tradicional Soy Como el Oro. Y tras el largo aplauso final del público llegaron los bises con la canción crítica Tu Piel y la farruca de Quintero, León y Quiroga; Pena Penita Pena. Y con permiso de la pandemia que lo sigue gobernando todo, en bajito nos atrevemos a decir que el relevo de Rosalía está en camino, sin intención de comparar la voz, la de la Llergó nos evocó el mismo sentimiento, del 30 de Junio de 2017 en el auditorio de la Illa de Arousa, que la ya internacional cantaora del Bajo Llobregat, por si acaso nos atrevemos a afirmar lo mismo que publicamos entonces de Rosalía, el de María José Llergó es el concierto que nadie debería perderse este verano.

Bonustrack en pandemia: En los tiempos que corren los consumidores de cultura tenemos que acostumbrarnos al formato de festivales, en la mayoría de los casos infumable y más caro de lo habitual (en gran medida por la necesidad de cumplir la normativa y restricciones actuales). Lo que ofrece sus ventajas, o no. “…Ahora, sin duda, puedes recuperar la sensación de ver a una banda en un espacio en el que no está el polvo llegándote a la cara,… ni el tío de al lado está superpuesto de éxtasis, ni escupiéndote a la cara, o sí lo puede estar,…” pero estará sentado a metro y medio de ti. Formato aberrante y necesario, por otra parte, que no exculpa de lo que está sucediendo a autoridades y diferentes gobiernos que legislan, por la salvaguarda de la salud. Porque el ocio, la cultura y la creación de contenidos deben ser seguros, también accesibles y normalizados, de esta forma la nueva normalidad debe tender a la antigua normalidad como la conocíamos antes, de otra forma el ocio y la cultura dejarán de ser lo que eran tanto para el provecho necesario de promotores como para el disfrute del público que asiste a este tipo de eventos.  

Texto: Jota Martínez