Ana Béjar “The Good Man”

  • 7.5/10
    Nota - 7.5/10
7.5/10

Resumen

El nuevo proyecto de la incombustible pionera del indie nacional y otras sonoridades (Usura, Orlando, íO, TODO) sale a la luz esta vez bajo el pseudónimo de su verdadero nombre Ana Béjar. Las comparaciones son odiosas pero desde la primera vez que la oí hace muchísimo tiempo durante un Benicassim en el año 2001 con su segunda banda Orlando, me llamó mucho la atención su voz grave pero nítida, oscura y luminosa a la vez, y que no tardé en comparar con PJ Harvey, en aquella época eran los años dorados de la vocalista y guitarrista inglesa y también compartía escenario con Ana Béjar en aquel lejano festival de verano. Hoy la vuelvo a oír y me vuelve a dar esa sensación de antaño con su personalísima voz, con lo que cuesta creer que se trate de una cantante española por el manejo del idioma anglosajón.

El disco viene acompañado de amigos y amigas como la fotógrafa Salomé Saguillo al metalófono y monotrón; el músico, periodista, espiritista y activista musical Aldo Linares y más músicos como Jesús Martínez que se encarga tanto de pianos, de guitarras, de coros como de teclados, Pablo Zúñiga al bajo y Alfonso H. Trancón a la batería. Y Ana Béjar con sus inseparables guitarras y con el Armonio, instrumento que data del siglo XIV y suena como una especie de órgano e instrumento de viento.

Este mini – lp, 5 canciones, que sin duda me retrotraen a los años salvajes del “Stories from the city, stories from the sea”, empieza con “In The Parlour”, un paseo por el elegante salón de nuestra alma con un piano perdido de fondo y la suave aspereza de la voz de Béjar con su rasgueante guitarra de cortinas rasgadas en la penumbra. El siguiente tema es una de las canciones estrella del disco donde Ana Béjar se transforma en una chamana mexicana con bebedizos amatorios (atención al videoclip) donde podremos disfrutar de su voz cantando en español e inglés en la seductora  y romántica “En el puente del aire”. Cerramos la Cara-A con “No return”, canción con sonido hipnótico donde Ana saca a relucir su lado wicca…The night will close our eyes….como si de los mejores temas del rock místico de la ex-Swans, Jarboe, se tratase, para hacernos una idea de este canto nocturno suyo.

La Cara -B de “The Good Man” la abre el tema “Visitation”, ritmos de vida polvorienta y esperanzada con un coro de ninfas como telón rojo de fondo donde la alegría es nuestro secreto mejor guardado y los sintetizadores son caricias. Por último el tema “Tongues On Fire”, canción para aullar a la luna junto a los animales que tanto ama Ana Béjar, canción exploradora entre luces cegadoras y también para mirar a las estrellas en esta noche de verano. Y además para amarse, claro, para que las lenguas hagan círculos mágicos al besarse. Un coro con tambor eleva a las lenguas en llamas.

El disco está dedicado a un hombre bueno, en este caso a Pablo Cobollo, pionero también de esa década de los 90 en que el rock and roll aún tenía mucho que decir, con sonidos rock- ácidos -sub urbanos y otras especies.

Sebensuí A. Sánchez

Khaös de Mago, poeta palabrista, filósofo imberbe, melómano colector desde que tenía 10 años. Ya daba patadas antes de salir a la luz, le contaba su madre, cuando en casa se ponía el “The Dark Side of The Moon”.