Madafackismo – Sociologia festivalera: Primavera Sound

En la Sección Madafackismo de este mes queremos presentaros, como si de un documental de animales de La2 se tratase, una radiografía de la fauna que habita en los festivales de música en España y sus dinámicas habituales de comportamiento (que pro ha sonado eso). No, no vamos a hablar de Alaska y los Pegamoides ni de Mario Vaquerizo y sus Nancys Rubias venidas a menos. De momento no nos hemos propuesto estudiar extraterrestres.

En este artículo queremos hablar acerca del moderno pesado de turno que no para de hablar en las primeras filas de los conciertos en el Primavera Sound de Barcelona y está más pendiente de que el viento no le estropee su look que del propio concierto o la guiri post-teenager en bikini que con nocturnidad y alevosía nos enseña las tetas en el FIB de Benicassim durante un concierto de Arctic Monkeys con la única finalidad de que accedamos a subirla en hombros y nos llevemos un buen subidón de adrenalina.

Pero, como diría Jack El Destripador (y tito Melvin Benn también), vamos por tandas.

Este mes os hablaremos de la fauna que habita en el Primavera Sound de Barcelona. Se trata del mayor nido de modernos por metro cuadrado de Europa. No tiene ni el glamour ni el clima del Coachella Festival pero la filosofía, en parte, es la misma. Los asistentes del PS son más guays que los asistentes al resto de festivales de España, so gilipollas. Y tienen el don de la ubicuidad para poder estar a la vez hasta en 8 escenarios aunque la mayoría no sepan ni el nombre de las bandas que están tocando en el escenario. Lo importante es estar allí, amics.

La fauna que abunda en el Parc del Forum de Barcelona se divide principalmente en cuatro especies dominantes: los exiliados, los fofisanos modernos, las bloggers de moda y los cuarentones culturetas venidos a menos.

El exiliado estará siempre con una birra en la mano (o un zumito en el caso de @Albritter) a la derecha de la torre de sonido del escenario en cuestión. Y en caso de duda o solape doloroso siempre elegirán la opción que contenga una dosis mayor de monóculo. ¿The Strokes o Earthless, grupo psicodélico americano que no lo conoce ni Dios? Earthless. ¿The Black Keys o Los Punsetes? Ganan de calle los segundos aunque los hayan visto de media unas 3 o 4 veces en el último año. Además, tienen una especial fijación por hacerse fans de grupos con nombres de animales tanto patrios (Perro, Chucho, etc) como internacionales (Arctic Monkeys, Gorillaz, Cat Power, etc).

El fofisano moderno es aquel hipster de mediana edad que solo conoce a los cabezas de cartel pero quiere aparentar ser un entendido de la escena indie del momento. Esta clase de festivalero es capaz de vestir una camiseta de Los Ramones o Nirvana sin tener ni puñetera idea del título de ninguna canción o declararse públicamente fan de Los Planetas como táctica de ligoteo. Bueno, con tocar teta se pueden conformar, que las indies son complicadas de camelar. Además, quieras o no se las arreglará para enseñarte sus carnes y que veas el tipazo fofisano que se gasta desde que va todos los días a clases de pilates.

Las bloggers de moda son probablemente la mayor plaga del siglo XXI junto a los economistas tertulianos de televisión y los agentes comerciales de Club de Lectores. La mayoría de las bloggers que escriben sobre moda están muy güenas (o eso es lo que se creen ellas). Pero lo cierto es que pierden todo el morbo que se les presupone cuando se presentan con su camarita de fotos en mano a la caza de happyflowers a los que fotografiar y en sus crónicas festivaleras en lugar de destacar los aspectos musicales solo alaban a aquellos artistas que visten como a ellas les gusta. Pobre Patti Smith, no saldrás en ninguna crónica happyflower de moda. Vergonya!

Los cuarentones culturetas venidos a menos son aquellos indies que empezaron a ir al FIB a mediados de los años noventa y que ahora no tienen ni aguante ni los mismos gustos que la turba fibertalibán que habita Benicassim cada verano. Por ello eligen la opción del Primavera Sound. Lugar idóneo para contarles a los imberbes hipsters batallitas de abuelo cebolleta y en qué conciertos tan maravillosos han asistido en las últimas dos décadas. Y de paso intentarán engañar a alguna chati despistada y dopada hasta el potorro. ¿Todavía hay gente que se pregunta por qué siempre llueve en el Primavera Sound? De pena……

Además, sus gustos musicales se han quedado anclados allá por 1998. Ride, Belle & Sebastian, Teenage Fanclub, Mogwai, Pixies, Manic Street Preachers, Los Fresones Rebeldes, Los Planetas, Australian Blonde, Surfin´Bichos, Sr.Chinarro, Suede, Sexy Sadie o La Casa Azul. Y sus conocimientos de la escena indie del siglo XXI se limita a Triangulo de Amor Bizarro, Los Punsetes y Bigott. Dentro de veinte años seguirán pidiendo que traigan a este selecto club de artistas a los festivales patrios aunque sea en sillas de ruedas.

En la próxima entrega de Madafackismo os hablaremos del FIB Benicassim. Calor, música, tetas y farlopa. Parece la sinopsis de una película de Almodóvar pero no.

Brais Iglesias Castro @Bricepinkfloyd