AC/DC – La Inmortal Carretera al Infierno

Este artículo es un honor escribirlo amigos madafackas, ya que hablaremos de una banda icónica, venerada mundialmente y que es un referente indiscutible desde hace cuatro décadas, además de uno de los pocos grupos respetados por fans de diferentes tendencias como el heavy, el punk o el rock clásico. Si todo esto no fuera suficiente es una de las formaciones pioneras en el sonido del rock duro, junto a otros grupos míticos del calibre de Black Sabbath, Deep Purple o Led Zeppelin. Sí, estamos hablando de AC/DC, of course!!!!

La banda nació en Sidney en 1973 de la mano de los hermanos guitarristas Angus y Malcom Young, jóvenes de origen británico que inicialmente contaron con Dave Evans como frontman para sus primeros bolos, aunque un año después fue sustituido por el cantante que daría forma perfecta al espíritu rockero y transgresor de la banda, Sir Bon Scott (curiosamente también de procedencia escocesa). Todo empezaba a cuadrar, y a pesar de no formar parte del grupo la hermana de los Young fue clave en su devenir, ya que sugirió el nombre de ACDC al verlo impreso en su máquina de coser y a la vez animó al genial Angus a vestir de colegial en las actuaciones, a sabiendas de que su hermano solía disfrazarse de gorila o Superman sin encontrar un vestuario que le identificara. Como anécdota reseñar que al principio dudaron de seguir con el nombre del grupo, ya que sus siglas significaban en determinados ambientes ser bisexual y no querían asociar su nombre con ningún movimiento o ser etiquetados.

Aunque las influencias de Angus eran principalmente el rock de Chuck Berry, el blues o Louis Armstrong, el estilo de la banda era un rock and roll furioso y básico, pura adrenalina que manejaba Bon Scott de forma magistral y chulesca desde el escenario mientras que la guitarra y los gestos sincopados del excelso Angus hacían el resto, siempre acompañados a la perfección por Malcom con la rítmica. High Voltage y TNT fueron sus primeros discos (ya con Mark Evans al bajo y Rudd como batería), siendo editados solo en Australia y donde ya empezaba a aparecer el crudo sonido de las bandas en temas como TNT, The Jack o la propia High Voltage.

Con un Scott cada vez más integrado en el papel de líder y la banda totalmente engrasada vuelan por primera vez a Europa, teloneando en 1976 a grandes del momento como Kiss o Aerosmith a la vez que lanzan Dirty Deeds Done Dirt Cheap, su primer lanzamiento europeo junto a la reedición de High Voltage. Ya con un incipiente éxito a sus espaldas deciden instalarse en su Reino Unido natal, donde su sonido áspero y directo es muy bien recibido en pleno apogeo del punk-rock. Cada vez se sienten más cómodos y Let There Be Rock (1977) y Powerage (1978) les aúpan a los primeros puestos de popularidad, llamando la atención musical la maestría de Angus y la personalidad arrolladora de Scott en  conciertos donde temas nuevos como Whola Lotta Rosie, Riff Raff o Rock and Roll Damnation causan furor en las huestes inglesas.

Powerage fue grabado ya con el bajista Cliff Williams en sustitución de Evans, un año antes del disco que marcaría la carrera del grupo y les convertiría en superestrellas mundiales, Highway To Hell (1979). Indiscutiblemente mucha parte de culpa tuvo el single que da nombre al disco, clásico ya mundial y que les abrió las puertas de par en par en la siempre exigente y reacia USA, a pesar de letras incómodas para la férrea moral conservadora americana.

Con este trabajo lograron por primera vez vender más de un millón de copias y reafirmar lo apuntado con anterioridad, que eran una banda de rock con mayúsculas que tenían al vocalista y guitarra con mayor carisma del momento. Lamentablemente el reconocimiento y el éxito no frenaron la vida al límite del salvaje Bon Scott y una fatídica noche de febrero de 1980, después de una borrachera brutal se quedó dormido en el coche y amanece muerto por una intoxicación etílica que hizo que falleciese ahogado en su propio vómito.

El disco inmediatamente se convirtió en objeto de culto para sus millones de fans al ser el último donde cantaría el ya inmortal Bon, y a pesar de la desazón de Angus y cia, la familia del cantante animó a la banda a seguir, siendo Brian Johnson (cantante admirado por Scott) el elegido para superar el durísimo mazazo. Con dudas sobre la aceptación de los fans pero con renovado espíritu sacan Back In Black, disco imprescindible de los 80 y que dispara espectacularmente las ventas del grupo con todos sus trabajos anteriores, superando con creces lo previsto y convirtiendo al álbum en el tercer más vendido de la historia junto a Thriller y Wish You Where Here. El disco es un pequeño homenaje al amigo fallecido, teniendo dos recuerdos fundamentales y espléndidos en su memoria: los temas Back In Black y Hells Bells, himnos históricos hoy en día y cantados de forma convincente por Brian Johnson, cuyo tono más chillón encajó perfectamente en el grupo y fue muy bien recibido por los fans, aunque nunca llenaría tanto el escenario como el mítico Bon.

Ya instalados en el cima del rock duro la banda no paraba de girar y triunfar por todo el mundo con espectáculos poderosos y llenos de fuerza, aunque sus siguientes discos nunca han llegado a la altura de los anteriores. Aún así temas como Heatseeker, That´s The Way I Wanna Rock And Roll o la musculosa Thunderstruck mantienen el espíritu de los grandes momentos y son trallazos geniales aderezados por la tremenda guitarra de uno de los mayores iconos del Rock, Angus Young.

Como curiosidad destacar que en el año 2000 les dedicaron una calle en Leganés y que lo primero que se agotó en Berlín tras la caída del muro fueron sus discos, dato demoledor sobre la importancia de un grupo que ostenta con letras de oro un puesto primordial en el Olimpo del Rock aunque sus últimas noticias no sean muy positivas: Malcom ha dejado la banda por demencia senil y todo apunta a que Axl Rose sustituirá a Brian Johnson en la gira americana por problemas de éste con la sordera. Pero esto ya forma parte de otra historia.

Saludos madafackas!!